La noche de este lunes, tanto el gobierno como el presidente Gabriel Boric celebraron el despacho de la nueva ley de adopción, tras 12 años estancada en el Congreso.
La norma ingresó a trámite a la Cámara de Diputadas y Diputados en octubre de 2013 y su debate se extendió por más de una década con diversos cambios presentados por los anteriores y actual gobierno.
Busca poner en el centro el interés superior de niños, niñas y adolescentes, sus necesidades y su derecho de vivir y crecer en una familia, priorizando la revinculación familiar con plazos acotados.
Además, establece un proceso integral y continuo, que evita extender la espera y fija plazos de entre 12 y 18 meses para se determine si se revincula con su familia de origen o se vincula con una familia adoptiva.
En X, el presidente Boric sostuvo que “después de 12 años de debate estancado logramos construir un acuerdo para modernizar la ley. Con el bienestar de los niños como norte acortamos plazos y burocracia”.
«Los primeros años son fundamentales en la formación de una persona. No es aceptable que porque la política no se pusiera de acuerdo los niños fueran perjudicados”, agregó en la publicación.
Por su parte, la ministra de Desarrollo Social, Javiera Toro, valoró el amplio acuerdo en el Congreso. “Estamos muy contentos, contentas, orgullosas de que se acabe de despachar la nueva ley de adopción en Chile”.
“Teníamos una deuda tremenda con niños, niñas y adolescentes, especialmente con los más vulnerados, con una legislación que estaba obsoleta y que requería ponerse al día (…). Quiero agradecer a todos los sectores que han concurrido a este diálogo y a este trabajo transversal”, añadió.
Finalmente, la subsecretaria de la Niñez, Verónica Silva, detalló que esta ley permite “reconocer en este proceso el derecho a ser oído de los niños, que es algo que es nuevo. Adicionalmente a eso, reconocer la importancia que tiene que los niños adoptados puedan conocer sus orígenes”.