La Policía de Investigaciones (PDI) está llevando a cabo diligencias para esclarecer el hallazgo de osamentas en la ribera del río Cautín, en la ciudad de Temuco. Las primeras pericias buscan determinar si los restos corresponden a origen animal o humano. En caso de confirmarse lo segundo, surge la posibilidad de que estén relacionados con la desaparición de Sebastián Francisco Jeldres Jeldres, de 35 años, cuyo rastro se perdió hace más de tres meses.
Este domingo 11 de mayo se cumplieron 96 días desde la última vez que se tuvo noticias de Sebastián. El hombre fue visto por última vez el 5 de febrero, cuando salió desde el sector de Pichicautín rumbo a su lugar de trabajo, al cual nunca llegó. Desde entonces, su familia y equipos de búsqueda han desplegado esfuerzos por dar con su paradero.
El hallazgo de osamentas ocurrió en el marco de estas labores de rastreo. Los restos fueron derivados al Servicio Médico Legal (SML), organismo encargado de establecer su origen y, en caso de tratarse de restos humanos, realizar las pruebas genéticas correspondientes para confirmar o descartar una vinculación con el caso Jeldres.
Alejandra Jeldres, madre del joven desaparecido, expresó el difícil momento que atraviesa su familia. “Necesito la tranquilidad, es mucho tiempo. Ha sido muy difícil como familia, muy agotador, y necesitamos ya tener alguna respuesta. Encontrar a mi hijo como sea”, señaló, visiblemente afectada.
Además, la madre indicó haber recibido llamadas anónimas que sugerían buscar en la ribera del río Cautín, lo que coincide con el lugar donde fueron encontrados los restos. El contenido y origen de estas comunicaciones también está siendo investigado por las autoridades.
La comunidad de Temuco sigue atenta al desarrollo de esta investigación, mientras la familia de Sebastián espera respuestas tras casi 100 días de incertidumbre.









