Más de un quinto de la población nacional percibe ingresos por debajo de la línea de la pobreza, si es que la medición se ajusta a parámetros alineados con el desarrollo económico que ha tenido el país en la última década.
Esa es la principal conclusión de la Comisión Asesora Presidencial, que entregó su informe final para actualizar la medición de la pobreza en Chile, fundándose en el diagnóstico de que los patrones de consumo y el acceso a servicios, entre otros factores, ameritan un estándar más exigente para el indicador.
Así, al aplicar cambios metodológicos, nuevos criterios y fuentes de información que recomiendo la Comisión, la tasa de pobreza nacional que reveló la última encuesta Casen (2022) sería de 22,3%, más que triplicando el 6,5% que se constató con la fórmula vigente.