En el recinto Sago, representantes del Gobierno Regional de Los Lagos, la Delegada Presidencial, Claudia Pailalef, el Consejero Regional, Francisco Paredes; representantes de los municipios de la provincia y asociaciones gremiales, participaron de la presentación de este importante instrumento público de tipo regional.
Uno de los objetivos es reducir las brechas de acceso al agua en sectores rurales y eliminar las listas de espera de SSR (Servicios Sanitarios Rurales), que actualmente se sitúan -a lo menos- 26.700 personas con arranques pendientes y cerca de 40.000 personas que se abastecen de camiones aljibe en algún momento del año.
La Política Regional para la Sostenibilidad Hídrica Región de Los Lagos, impulsada por el Gobernador Regional, Patricio Vallespin López, plantea que existe una oportunidad real de transformar a la región en el nuevo foco de desarrollo del riego a nivel nacional, con una superficie potencial que supera las 100.000 has y un desarrollo de a lo menos 50.000 has de nuevo riego en 30 años, lo que resultaría en un aumento del producto agropecuario en un más de USD 300 millones de dólares al año, con un impacto positivo en el PIB regional de un 4,7%.
Las proyecciones climáticas hacia el período 2035-2065 indican un aumento de la temperatura promedio regional de cerca de 1,2 °C – dos veces el valor nacional- y una disminución significativa en las precipitaciones, principalmente en temporada de verano, pasando de una frecuencia de sequías de un 11,4%, hasta llegar al 34,8% a nivel regional, y 40,1% en la provincia de Osorno. Si bien la región es excedentaria en términos de balance hídrico (relación entre la oferta y la demanda de agua), la dependencia directa de las precipitaciones para diversos usos del agua implica que la región será más susceptible al cambio climático, lo que requiere de una gestión eficiente y sostenible del recurso.
En este escenario, el Consejero Regional, Francisco Paredes Moraga, indicó que es necesario contar con esta política, ya que si bien la región es lluviosa, no es constante para los diversos usos del agua y requiere de una gestión eficiente y sostenible del recurso.
La coordinadora de la elaboración de este instrumento del Gobierno Regional, Rocío Vera, indicó que se hizo un proceso altamente participativo «trabajamos con más de de 1.800 habitantes del territorio, quienes lograron identificar los problemas que nos afectan hoy día en la región, las soluciones también y priorizamos también. Contó con una buena participación de la provincia de Osorno, sobre todo la gente de las actividades productivas, que participaron activamente durante todo el proceso y, bueno, la política tiene, una de sus dimensiones tiene que ver con el agua para las actividades productivas y es ahí una línea de financiamiento bastante grande que involucra distintas acciones, desde caminar hacia un riego tecnificado, desarrollar un turismo sustentable, sobre todo en el sector rural, hay otras líneas que tienen que ver con el fortalecimiento de la educación ambiental, así que los invito a involucrarse en este proceso, a mirar la página web donde está publicado todo este proceso https://politicahidrica.goreloslagos.cl/
Es importante destacar que el Consejo Regional participó de forma activa, propuso, recogió, levantó inquietudes de la ciudadanía. Así lo señaló el presidente de la Comisión de Medio Ambiente y Cambio Climático del Consejo Regional de Los Lagos, Francisco Reyes Castro, «Estuvimos en las asambleas precisamente ligadas a las propuestas con los servicios públicos, con la comunidad, con los servicios sanitarios rurales, los ex APR. Creemos que hemos logrado un producto importante para poner a disposición de la política pública. Esta política, va a concentrar el trabajo del Gobierno Regional, pero también de los servicios públicos ligados al agua, en un trabajo combinado, articulado y colaborativo en pos del bien común, en pos del abastecimiento de agua a nuestras comunidades de zonas rezagadas”.
Cabe destacar que esta iniciativa es la primera que se realiza en el país a nivel regional y de forma participativa, transformándose en ejemplo y modelo replicable para otros territorios y para un modelo nacional en la gestión sostenible de los recursos hídricos.