A pesar de la pandemia, estos dispositivos han adaptado su trabajo para seguir prestando atención a la población usuaria.
Desde ambos Centros de Salud Mental Comunitaria (Cosam) de Osorno (recintos Oriente y Rahue), parte de la Red del Servicio de Salud (SSO) y cuya derivación se hace desde la Atención Primaria, hacen un positivo balance de su labor durante el 2020, año marcado por la pandemia del Covid-19, en que han debido adaptar su trabajo para seguir prestando atención a la población usuaria.
Es así como desde el Cosam Oriente, el jefe (s) Pedro Fritz, expresa que a 1 año de la inauguración de las nuevas dependencias “el balance es muy bueno, ya que en el antes y el después, te das cuenta de que la calidad del trabajo y la forma de hacer las cosas han mejorado notoriamente”.
“Más aún en este contexto de pandemia, el Cosam genera un espacio de protección y como funcionarios de la salud podemos sentirnos muy orgullosos de, tanto lo que el Servicio de Salud Osorno ha hecho para lograr este edificio, como nosotros de poder mantenerlo y de los usuarios de poder cuidarlo”, enfatizó.
Por su parte, la jefa del Cosam Rahue, Francisca Díaz, comentó que “este año de pandemia ha sido muy desafiante para el equipo de salud, al ser capaces de mantener las atenciones y los controles, donde han sido agentes claves la comunidad y la red, para rápidamente darnos cuenta cuáles son las alertas de algunas atenciones o personas que necesitan más control”.
“El equipo ha estado muy disponible, haciendo incluso turnos extra para poder cumplir nuestra misión de prestar atención a todos los usuarios, y quiero destacar también a la comunidad, a nuestro Consejo, por siempre estar muy atentos. Nuestro desafío ha sido equilibrar las atenciones presenciales y remotas, para poder asegurar la calidad de las intervenciones”, destacó la profesional.